– RESTAURANTE LA MAR SALÁ –
Introducción
Un hecho fortuito, casi necesitado, se convierte en una seña de identidad. Hoy, referente de unos de los restaurantes más reconocidos del territorio valenciano: La Mar Salà de Cullera.
En un enclave privilegiado, protegida su naturaleza. La playa del Dosel. Un sitio único, una experiencia gastronómica pero también cultural. Una cultura que es fiel a la tradición, la del esmorzaret, convertido en ritual en La Mar Salà.
Allá por 2012, el propietario, Fernando Piris Llopis (alma mater del restaurante junto con su esposa, Raquel Torres Font) advierte que el restaurante no es lugar de paso, enclave popular. Inicia una impactante política publicitaria y pocos días después empieza a llenarse de ciclista. Se ve sobrepasado y decide pedir ayuda a los mismos comensales. Les sirve el pan y en un caldero, los sepionets. “Sírvense ustedes mismos…”, cuasi clama. De la carencia, un símbolo. A los comensales les encanta la propuesta y comienzan a llegar en masa. La Mar Salà se convierte en un emblema.
Por separado, el producto se aprecia mejor. El almuerzo es pausado, tranquilo, degustativo.
Pero ni mucho menos es lo único. Gusto por la comida mediterránea, la de kilómetro cero. Y arroz, mucho arroz. Situado junto a los arrozales de la Ribera Baixa, La Mar Salà es capital de los arroces, con un sinfín de fórmulas que recuperan modos tradicionales, siempre con el uso de productos de temporada y de la zona. La Mar Salà, diferente, excelente. El templo del almuerzo valenciano.
Entorno
Belleza paisajística, tranquilidad y exclusividad. Lo ofrece toda la playa del Dosel de Cullera, donde se sitúa La Mar Salà. Por eso, la experiencia culinaria sabe mejor.
Por el entorno, por la hermosura. Disfruta de uno de los cordones de dunas más significativos del territorio valenciano por su riqueza floral, pero también por sus dimensiones. Enclavada en el Parque Natural de l’Albufera, la playa del Dosel ofrece exclusividad porque se distancia del núcleo urbano de Cullera, por lo que la urbanización es escasa y domina el medio natural en su esplendor.
Limita al norte con la playa del Mareny de Sant Llorenç y al sur con el cabo de Cullera. Casi dos kilómetros de playa para pasear, leer o disfrutar con la familia, en lo que representa una jornada perfecta que reúne todos los condicionantes.
Es ahí donde se sitúa La Mar Salà, un restaurante que es, mucho más, un establecimiento que forma parte de una experiencia inigualable. Sus amplias terrazas con vistas al entorno de dunas y a la azul esmeralda de las playas permiten disfrutar un poco más. Es sabido que también se come con los ojos.
La filosofía del restaurante, además, es respetuosa con el entorno y su riqueza, ya sea por el uso de los productos locales como por los de temporada.
La playa, el sol y la diversión en verano. La tranquilidad, la naturaleza y la reflexión en invierno. La mejor gastronomía, en el mejor lugar.
Historia
Pioneros en los almuerzos, entendidos como un momento innegociable cada día. Pero también exclusivos por el trato con el producto, de calidad, de temporada, de la zona. Por el respeto por el entorno. La Mar Salà es la traslación del territorio al plato, la degustación de una tierra. La cocina mediterránea, la riqueza del mar. El restaurante lleva ya más de una década asomado al mar, ofreciendo una experiencia gastronómica a miles y miles de visitantes llegados de todos los rincones del mundo. Presidido por una imagen de Neptuno, el Dios del Mar, en honor a Enrique Torres, es fiel a la tradición culinaria mediterránea pero sin rechazar la experimentación que le permite estar en la vanguardia de la gastronomía valenciana, sumando numerosos premios en concurso de prestigio. La tradición no choca con la creatividad. Así, en La Mar Salà se pueden degustar recetas rescatadas del ostracismo, recuperando sabores y olores que se degustaban en décadas pasadas en Cullera. Es el caso del arroz Neptuno, elaborado con migas de congrio y marisco y que se ha recuperado de la receta que cocinaba la madre de uno de los propietarios cada domingo en casa. En general, productos fresco de la huerta y el mar, con sabor valenciano. La ensalada del Dosel (con lechugas, mango, habitas tiernas confitadas, tomatitos, micuit y vinagre balsámico); los calamarcitos de playa en su tinta rellenos de blanquet; la escalibada con lomo de lubina; el bacalao rebozado con all i oli; las gambitas encebolladas… O las “coques de dacsa” con carpaccio de bacalao y escalibada, con verduras, con queso de cabra, con anguila ahumada… Las opciones nunca acaban en La Mar Salà.
Por no hablar de los arroces. La paella mixta; la de pollo y costillas; la valenciana; la paella con costillas, nabo y garbanzos; la de magro de cerdo y verduras; la de pato con garrofón; la rural; la vegetaría… siempre son necesarios los puntos suspensivos porque, siempre, siempre, existe un plato más. De calidad. Por ejemplo, la paella de Cullera, creada por los distinguidos chefs de la localidad con productos típicos de la zona como el caldo de pescado, los langostinos, el sepionet, salmonetes, el tomate local, un figatell de escorpa, especias y por supuesto el arroz.
Carta de comidas
Bienvenidos a nuestro restaurante. Aquí podrán encontrar una amplia carta de comidas para satisfacer todos los paladares.